Por primera vez en la historia de la democracia, España se encuentra en estado de alarma. El Gobierno lo decretó ayer por la mañana, y lo hizo oficial a partir de las 13:00 horas del mismo día, con motivo del abandono masivo que los controladores aéreos hicieron de sus puestos de trabajo, alegando problemas de salud. Debido a que la actitud por parte de los controladores no se ha modificado y la mayoría no han regresado a las torres de control, el vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha explicado que los controladores estarán a partir de ahora bajo la custodia de las autoridades militares, y que quedan movilizados para que poco a poco vayan reincorporándose a sus puestos. Rubalcaba también ha informado que de no hacerlo, los controladores estarían cometiendo un grave delito de desobediencia.
No obstante, el ministro de Fomento, José Blanco, durante una entrevista realizada por TVE, ha asegurado que los controladores están reaccionando al estado de alarma y ya van apareciendo por los principales aeropuertos. "Hay normalidad en la asistencia de controladores, pero aún tardaremos un tiempo en que los aviones puedan entrar y salir de los aeropuertos ya que hay que cargar las órdenes de vuelo y organizarlo de forma coordinada con Eurocontrol", ha comentado el ministro.
Sin embargo, la normalidad completa no llegará a los aeropuertos hasta pasadas de 24 a 48 horas. Son muchas las compañías de vuelo que han anunciado que no operarán hasta pasado ese tiempo de recuperación. Aún son muchas las personas afectadas que esperan en los pasillos y hacen cola en los aeropuertos, con el objetivo de poner sus reclamaciones y recibir algún tipo de indemnización.
Fuente: El Pais
Cientos de personas se han visto afectadas por la huelga de los controladores aéreos
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